
🌺 Bunga Bangkai, así llaman en Indonesia a una planta famosa por dos rasgos inolvidables: su imponente tamaño y un aroma repulsivo. Su espádice, una estructura alargada que alberga flores diminutas, puede alcanzar hasta tres metros y medio de altura. Y en cuanto a su olor… se dice que algunas personas han perdido el conocimiento por acercarse demasiado a esta maravilla del reino vegetal. Así que, tápense la nariz mientras conocemos a la flor cadáver ☠️
🌏 Amorphophallus titanum es el nombre científico de nuestra protagonista. En 2008, el naturalista David Attenborough introdujo el nombre alternativo titan arum en una serie documental de la BBC, ya que consideró que el nombre del género no era el más adecuado para la televisión 📺😐
🤔 La biología reproductiva del titan arum ha estado rodeada de misterio y malos olores. La razón es que cada ejemplar tarda aproximadamente mil días en florecer, pero su inflorescencia se marchita en apenas tres días. En el Jardín Botánico de la Universidad de Bonn, donde cultivan esta especie desde hace más de 70 años, solo han logrado ver 14 floraciones entre 1937 y 2009 🌸
🪰 La ciencia, sin embargo, ha revelado algunos secretos del titan arum. Durante su breve periodo de floración, la planta despliega un conjunto de adaptaciones para simular un cadáver en descomposición. Por la noche, emite un cóctel de moléculas malolientes con un fuerte olor a azufre, que atrae a moscas y escarabajos en busca de un cuerpo en descomposición. Estos insectos, aunque engañados, consideran el olor delicioso, pero no encontrarán ni comida ni un lugar para poner sus huevos 🤢
👃 El mimetismo químico es una estrategia en la que se usan sustancias para engañar con fines diversos. Las titan arum no son las únicas tramposas del reino vegetal. Por ejemplo, las orquídeas Ophrys sphegodes imitan el aroma de las abejas hembras de la especie Andrena nigroaenea para atraer a los machos y asegurar así la transacción de polen 🐝
🔥 El engaño del titan arum va más allá del olor. Su gran espata, esa suerte de capa situada en la base del espádice, es de un rojo oscuro o granate que imita la carne en descomposición. Además, refuerza su artimaña con otra increíble adaptación conocida como termogénesis. Durante la floración, el titan arum genera calor, elevando la temperatura de su espádice hasta entre 36 ºC y 38 ºC, simulando la calidez de la descomposición, brindando así un refugio nocturno y agradablemente apestoso, que atrae aún más insectos 🦟

🧬 La ciencia sigue desentrañando los secretos de la titan arum. Un estudio reciente investigó las vías genéticas detrás de la producción de calor en esta planta. Científicos del Dartmouth College aprovecharon varias floraciones de Morphy, una flor cadáver de 21 años que reside en el invernadero universitario, para recolectar muestras de tejido. Extrajeron ARN de estas muestras y analizaron las secuencias genéticas, identificando genes que interrumpen el almacenamiento energético químico. También hallaron genes que participan en el transporte y metabolismo del azufre ⚗️
🧪 Gracias a una técnica llamada espectrometría de masas, los investigadores detectaron altos niveles de metionina, un aminoácido rico en azufre que se transforma en moléculas volátiles de olores penetrantes al calentarse. Además, identificaron un nuevo componente del olor de la flor cadáver: la putrescina, un compuesto que, como ya nos adelanta su nombre, aparece durante la descomposición de los cadáveres 💀

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