
Las semillas de Ceratocaryum argenteum, una planta endémica de la Reserva Natural De Hoop en Sudáfrica, tienen un notable parecido con los excrementos de los antílopes bontebok 💩 Redondeadas, de color pardo, de no más de 1 cm de largo y con un fuerte olor a excremento 😮 ¿Por qué la planta necesita que sus semillas tengan semejante presentación? La respuesta la encontramos en los escarabajos peloteros que merodean por el barrio 🤔
Cuando un escarabajo pelotero encuentra un excremento 💩 lo traslada y entierra para comérselo más tarde o alimentar a sus crías. Con su elaborado disfraz, las semillas de Ceratocaryum argenteum se hacen pasar por la comida de estos insectos y así consiguen que las entierren.
Para poder germinar 🌱 las semillas de Ceratocaryum argenteum necesitan que haya un incendio 🔥 Permanecer sobre el suelo las expone a los efectos del Sol ☀️ por eso es mejor esperar enterradas a que llegue el fuego. Al engañar a los escarabajos peloteros consigue poner a salvo sus semillas. El engaño es tan sutil, que incluso los compuestos volátiles que emiten son parecidos a los que aparecen en los excrementos del bontebok. Un pestilente y eficaz plan 😎
Más información:
Faecal mimicry by seeds ensures dispersal by dung beetles
🌳🐅🌳 Formando un cuarteado dosel de árboles. O una maraña de tallos, hojas y ramas. Creando una tela a través de la cual se escurre, para bailar con las sombras, la luz del Sol. Y entre ese baile, se esconde, repta, corre, salta, vuela, crece, compite, devora, es devorada y se descompone. La verás por todas partes, en el día y en la noche. Incluso más allá de la delgada capa de hojarasca y del húmedo barro que puedas excavar con tus manos. Incluso bajo la superficie de ríos imparables o tocando las nubes. Y más allá. Rodeada por el inmenso azul de océanos y mares. Medrando en lo más profundo, en los lugares donde el Sol cede su reino a otras fuerzas. También allí donde solo parece que hay arena y rocas azotadas por el calor. O donde el hielo y el frío reclaman su blanco dominio. O en tu interior, frenético, ordenado y apetitoso para amigos y enemigos. La vida, desafiante y cabezota, se pega a las todas superficies, rugosidades y escondrijos de la Tierra. Sobrevive y evoluciona, en una larga cadena temporal de criaturas que enmudece las décadas, siglos y milenios que puedas contar. Y ahí estás, Homo sapiens, pidiendo respuestas sobre los misterios de la vida. La ciencia tiene las respuestas que exige tu curiosidad. Y aquí, en Myrmarachne, te las relato 🌎 🌍 🌏
🐜 Si no quieres perderte ninguna historia de Myrmarachne, puedes seguirme en la red social que más te guste 👇
📜 O suscribirte a la Newsletter de Wallace para recibir todas las novedades en tu email.
☕️ Y si quieres apoyar el trabajo que realizo, puedes invitarme a un café ☕️ o hacerte mecenas de Myrmarachne en Patreon. Así tendré más energía para rastrear otras historias y escribir sobre ellas.
🐜🐜🐜🐜🐜