
Tiburón cabeza de pala (Sphyrna tiburo). Foto: Tony Hisgett.
El tiburón cabeza de pala (Sphyrna tiburo) no le hace asco a las ensaladas de algas. Los investigadores han descubierto que ingiere grandes cantidades de algas marinas y que su sistema digestivo es capaz de procesarlas y extraer nutrientes. En concreto cuenta con una enzima β-glucosidasa que degrada la celulosa.
Dos nuevas especies de ranas fueron descubiertas en la cuenca del Amazonas. Ambas presentan manchas naranjas en sus patas. Han sido bautizadas como Dendropsophus kamagarini y D. kubricki, esta última en honor de Stanley Kubrick por su película La Naranja Mecánica.
Los camarones mantis son conocidos por su forma de cazar. Usan un apéndice con el que golpean a sus presas con una fuerza y velocidad increíbles. Son capaces de romper caparazones, conchas y dedos incautos. Los investigadores han descubierto que estos crustáceos han tenido que desarrollar una estructura para protegerse del daño autoinfligido.
Las imágenes de un camarón mantis usando su poder nunca sobran:
Cuando se habla de dispersores de semillas se suele hacer alusión a los pájaros. Sin embargo, no siempre son los más importantes. En el sudeste de Alaska abunda el salmón que atraen a los osos pardos y negros. Entre sushi y sushi los osos comen bayas de arbustos, volviéndose los principales dispersores de semillas de la región.
Al menos 50 especies de peces, que viven en ecosistemas tropicales, son comedores de escamas. Estos peces son capaces de digerir escamas enteras que toman de otros peces, quizás para conseguir nutrientes del revestimiento mucoso. Esta dieta influye en su comportamiento y la evolución de su cuerpo.